|
El tejo es arbol fuerte, de gran corpulencia en nuestro pais, con el
tronco hasta de 1,5 m. de diametro cuando esta bien desarrollado, y
de unos 15 ni. de altura, con las ramas extendidas, muy abiertas o
colgantes ; las hojas las tiene muy angostas, planas, agudas o
mucronadas, verdinegras en la cara superior, esparcidas a lo largo
de todo el ramillo, pero dispuestas en dos carreras, porque los
breves rabillos que las sostienen, torciendose, las disponen con
aquella regularidad y como si las hubieran peinado. Las flores
masculinas estan en un arbol y las femeninas, en otro, por lo que se
puede hablar de tejos machos y hembras. |
Se dice del tejo que es dioico
porque tiene dos moradas, una para los varones, representados por
las flores masculinas, y otra para las hembras, las flores
femeninas. Aquellas forman unos globitos de numerosos estambres; y
las flores femeninas estan constituidas por un solo rudimento
seminal, que, cuando llega a la madurez, esta rodeado en la base por
una especie de cupula carnosa de color encarnado.
Florece en primavera, y madura sus semillas en otoño. Se cria en las
laderas sombrias y en los barrancos. Prefiere los suelos calcareos
de manera bien ostensible. No forma bosques, sino que se mezcla a
otros arboles en las umbrias. Teme las heladas tardias, cuando el
arbol ha movido ya; entonces los ramillos tiernos de la nueva
brotadura, por el frio, toman color rojo encendido. En nuestro pais,
este arbol se va extinguiendo poco a poco, porque apetece las
nieblas y la templanza de las primaveras sin hielos. Por esto, suele
enriscarse en las cumbres aisladas de las montañas calcareas no
excesivamente elevadas, las mas veces entre 500 y 1500 m. A menudo
quedan huellas toponimicas del tejo en lugares donde ya no existe
sino en el recuerdo Fuente del Tejo, Font deis Teixets, Pui-al-Teix,
la Tajera, la Tejera, la Tejosa, Sierra Tejeda, Cova del Teix... y
muchos mas.
Aparte otras substancias de poco interes, el principio activo del tejo,
que se encuentra en las raices, ramas, hojas y semillas de este
arbol, es decir, en todos sus organos, salvo en la cupula carnosa y
roja que rodea la simiente, es el alcaloide llamado taxina, amorfo,
de sabor amargo, insoluble en el agua y soluble en el alcohol.
Contiene tambien el glucosido taxicantina, que cristaliza en forma
acicular, se disuelve en el alcohol y en el agua y es menos amargo
que la taxina. Ademas, en aquellas cupulas rojas, sin taxina, se
halla cierta cantidad de efedrina, tan escasa, que no llega a 2
miligramos por 100 gramos. Prescindiendo de esta cupula, todos los
organos del tejo, por la taxina que contienen, son venenosos, pero
su toxicidad no es la misma para todos los animales. Parece que los
rumiantes son singularmente resistentes, asi como los conejos y las
liebres ; y el caballo, y tambien el hombre, sucumben con facilidad.
A las vacas que lo comen, aun siendo rumiantes, el tejo las hace
abortar; es planta tenida por emenagoga y abortiva. Y secas, sus
hojas se tienen por mas activas que frescas.
En la medicina popular el tejo no debe emplearse nunca. Su toxicidad
haria en extremo peligroso su uso. El alcaloide que contiene, la
taxina, es un veneno del sistema nervioso y del corazon, que acaba
paralizandolo. La intoxicacion empieza excitandolo, con gran
frecuencia de las pulsaciones; pero poco despues sobreviene el
efecto contrario, la excitacion se calma y la presion sanguinea
disminuye. Se producen dolores de estomago e intestinales, diarrea y
convulsiones; una gran inflamacion en los riñones y en el higado,
las pupilas se dilatan, y, finalmente, por paralisis cardiaca, la
muerte. Pueden atajar la intoxicacion los lavados gastricos e
intestinales, y el carbon animal suministrado a grades dosis pero
debe procurarse sostener el corazon con excitantes adecuados.
Jarabe pectoral: Con el zumo de las cupulas
encarnadas del tejo, privadas de las semillas, que tambien son
toxicas, prensadas, y con doble cantidad de azucar, se prepara un
jarabe pectoral; es mejor elaborarlo en frio, mezclando zumo y
azucar en una botella o garrafa adecuada, y removiendo la mezcla
hasta la disolucion de todo o de casi todo el azucar. Es inocuo y se
administra a cucharadas. |